Tengo clarísimo que no conocemos nuestros límites, que nuestro cuerpo es sabio y fuerte y si que es cierto que hay que cuidarlo, pero a mi me encanta llevarlo al límite.
Después de una semana dura, y de acabar el viernes agotada, llego el sábado, me levanté a las 8:30, desayuné y preparé la mochila para subir Matagalls desde Collformit, una salida con amigas para reír y relajarme un poquito, justo cuando estoy apunto de salir, recibo una llamada y mami esta malita, toca irla a cuidar. Después de la visita del médico y de camino a la farmacia, recibo otra llamada, necesitan que haga de canguro de los peques. Después de hacer de canguro, de cuidar a mi mami y hacer la compra vuelvo a casa muy muy muy cansada. Había quedado para cenar con un amigo, no tenia ni fuerzas para hacer la cena. Y llega mi amigo, después de vino y hummus, de una peli de miedo y capitulo de Vikingos, empezamos a hablar hablar y hablar y de repente son las 5:15, de un salo me levanto hora de ir a la cursa, sin dormir, pero con tanta tanta ilusión que nada me puede parar.
Un café americano, un abrazo y empieza la cursa!!!! por delante 42 km y 1700 m de desnivel positivo, detrás una noche sin dormir y un día agotador, todo un reto acabar la cursa. Empiezo a correr y rápidamente me quedo sola, el sol empieza a salir, disfruto cada segundo del paisaje, precioso, el mar y caminos en la montaña solitarios. Los avituallamientos están cerquita el uno del otro así que te ayuda a sumar kilómetros y tener metas cortitas. Todo el recorrido espectacular, me encanto, con ganas de repetirlo sin prisas y disfrutando. La organización genial! en los avituallamiento los voluntarios un amor, bueno es que fue todo fantástico. Y después de 6 horas y 40 minutos entré a la meta, entre aplausos con una emoción y rebosando felicidad, que gran día, que gran fin de semana. Pero aquí no se acabó el fin de semana, ducha, comida con risas, dolores por doquier, encuentros casuales y de vuelta a casa, música a tope.
A las 21:40 estaba en la cama, no podía creer todo lo que hice en 36 horas. Me he sentido fuerte, feliz, cómoda, todo ha fluido. Después de la cursa esta era la carita de felicidad que tenia!
A continuar con la vida!